Por Víctor Manuel Barceló R.

En Tabasco termina el proceso electoral, el domingo 22 de octubre, con la entrega de Constancia de Mayoría, a Andrés Granier, candidato del PRI a gobernador, quien logra muchos puntos porcentuales de votos, arriba de su principal contrincante. Lo normal sería que nos pusiéramos a trabajar, para aterrizar las ofertas de campaña, adicionándolas con aquellas surgidas en la oposición, pero que se pueden asimilar a las del triunfador.

De plano, si son novedosas, merecen considerarse, tanto en los primeros cien días de gobierno, como en la conformación del Plan Estatal de Desarrollo. Este sería un paso, desde la planeación, para la conciliación con fines de bienestar social. Esperamos, sin menoscabo del derecho de otros partidos para presentar sus alegatos en las instancias que correspondan, sus cuadros políticos y técnicos, acepten trabajar en la construcción de un andamiaje, jurídico-económico-social, que de el impulso al Estado, hacia nuevas condiciones de su infraestructura y la conformación de nuevas empresas –están pendientes la refinería y la hidroeléctrica, que Fox ofreció a Centroamérica- que debieran ser polos de desarrollo del nuevo Tabasco.

A nivel nacional hay incertidumbres no resueltas: la toma de posesión de dos presidentes –de los tres en juego- el caso Oaxaca que se empantanó ante la incapacidad política del gobierno federal, y otros focos rojos, incluso en la economía, ante la pérdida de nivel de crecimiento de la estadounidense. Todos esos asuntos se tendrán que atender en lo federal. Para ello está la propuesta del Presidente electo –Proyecto 20-30- que merecerá ser vista con detenimiento.

La puntual tarea de conformar un Programa para los cien primeros días y posteriormente el Plan Estatal de Desarrollo, tendrá que considerar los tremendos rezagos del estado, con respecto al país. La pobreza extrema –por ejemplo- flagela al 30% de la población, frente al 19% nacional. La economía estatal, con una infraestructura rural en el peor atraso de su historia, nos dibuja un sector rural del 46% que produce el 8% del PIB local, frente a un 25% nacional de población rural, que produce el 6%. El estado posee el 30% del agua nacional, pero cuenta con la menor superficie de riego. La puesta en marcha del Plan Hidráulico -tan cantado desde hace tiempo- llevaría a la creación de empresas agropecuarias, pesqueras y acuícolas, rentables, que elevarían las condiciones de vida de toda la población, al extenderles a la agroindustria, nacional y de exportación.

La participación de capitales y tecnologías de otros rumbos del país, colaborarían a la integración nacional. Detener el deterioro de los recursos nacionales –los del sureste en particular- es un compromiso ineludible. Las pérdidas de selvas y bosques, la contaminación de ríos, lagos y otros cuerpos de agua, por la explotación de hidrocarburos, debe ceder al aprovechamiento sustentable de los mismos. El sureste es el último espacio nacional para una adecuada explotación agropecuaria. El petróleo pareciera que disminuirá, si no en sus reservas, si en la explotación, para moverse a zonas de Veracruz y otros lados. Ello no impedirá que Villahermosa sea la capital energética del país.

Aquí entra la capacidad de organización social de los tabasqueños –ya dieron una amplia y consolidada muestra durante la campaña- para poder entrar a las explotaciones alternativas como el turismo, de todo tipo y categoría. Pero nada tendrá posibilidades reales de éxito, si los programas educativos no adquieren los niveles necesarios para formar los cuadros que han de cubrir las especialidades que se requieran. Los problemas de la educación son profundos. Necesitan una atención del mismo calibre.

Urge una nueva infraestructura para todos los niveles –inicial, media y superior- y una cobertura universal que otorgue a todos, maestros y alumnos, la posibilidad real de competencia, con y hacia otros puntos del país, como con las presencias que pronto habrá, de hombres y mujeres de Canadá y Estados Unidos, listos a ocupar los espacios para los que no estemos debidamente preparados. Un gran reto está en la perspectiva, para conformar un equipo en educación, preparado, limpio, transparente en el uso de los recursos. Este será el primer aliento, para recuperar el paso al futuro. Iniciémosle.

Correo electrónico: v_barcelo@hotmail.com Villahermosa